PSICOLOGIA
Los valores y los principios son parte fundamental del desarrollo de los niños porque constituyen guÃas de interacción y de funcionamiento interior determinantes en la estimulación de la inteligencia emocional.
LOS VALORES EN LA SOCIEDAD ACTUAL
Actualmente se vive una crisis de valores, expresada en una gran dificultad para tolerar la diferencia, incapacidad para ser solidario, ausencia de respeto frente a las necesidades de los demás, la falta de responsabilidad y de compromiso, la incongruencia entre lo que se piensa y lo que se hace, la diferencia ante el dolor de los demás, la agresividad como primera reacción, el apego a la moda, las cosas y el dinero.
Si queremos que nuestros hijos crezcan en un mundo de valores tenemos el compromiso de construirlo nosotros. Es en la familia donde se construyen e inculcan verdaderamente los valores, el colegio ó escuela solo son los encargados de reafirmarlos, más NO de inculcarlos.
Mantener una postura clara y decidida, y respaldarla con una acción (ejemplo), permite que los valores se consoliden y que los demás aprendan a reconocerlo y puedan apropiárselo en sus vidas.

Los valores se construyen en un proceso que dura toda la vida pero que tiene su momento critico en los primeros años de vida; es allà donde se sientan las bases de lo que será la estructura ética del adulto.
Los valores se aprenden en la medida en que se ponen en práctica y se consolidan ejercitándolas, al igual que con otras artes. Aprendamos a hacer las cosas al hacerlas: los niños aprenden a leer, practicando la lectura; a tocar la guitarra, tocando la guitarra.

El niño atraviesa por diferentes etapas en la comprensión, interiorización y puesta en práctica de principios y valores. Es muy importante papás que entendamos esto para asà orientar su enseñanza y construcción.

​A continuación se hace una breve descripción de cada una de estas etapas y algunas sugerencias para estimular los diferentes progresos que el niño esta en capacidad de lograr en cada una de ellas.
Los niños no aspiran a nada distinto de seguir el ejemplo de aquellos a quienes aman, para esto los adultos deben ser un modelo digno de imitar. Hay que recordar que los niños aprenden más de lo que ven que de lo que oyen, es esta medida amarán y respetarán tanto a los demás como lo hacen sus padres; si los padres continuamente critican, humillan o mienten, los niños crecen con una actitud semejante.
Para que los niños sean optimistas, generosos y considerados, hay que mostrarles actitudes positivas.

3 a 6 años
- El niño se da cuenta que forma parte de una comunidad.
- Goza ayudando a otros.
- Empieza a mentir
- Acata simples reglas como "sin pegar", cuando sus padres o maestros se lo dicen.
Como estimularlo
- Inculcar los sentidos de ayudar, compartir, buenos modales y simples quehaceres en la casa.
- Reforzar las reglas y empezar a explicar por qué son necesarias: "si me pegas me duele".
- Promover los juegos libres, la cooperación y la honestidad.
​7 a 11 años
- ​​​Llega a ser crecientemente dogmático.
- Adquiere poco a poco el sentido de la honradez.
- Se considera bueno porque otros piensan bien de él y malo porque los demás lo ven como tal.
- Siente empatÃa hacia personas que conoce.
- Percibe y comprende el punto de vista o la perspectiva de otra persona.
- Sabe cuando acercarse a un amig@ que está triste y cuando alejarse.
​Como estimularlo
- ​Demostrar respeto por el niño en nuestra condición de adulto; insistir en ser respetado incluyendo el respeto por las reglas de la familia.
- Resolver los conflictos por medio de diálogos, arreglos y humor, si es posible. Tomar la iniciativa.
- Inculcar acciones de caridad y solidaridad.
12 años en adelante
- Ha aceptado internamente lo que quiere decir ser una persona buena.
- Examina sus valores.
- Puede tener una perspectiva de los otros.
- Responde más a los estándares de sus compañeros que a las reglas de los padres.
- Se siente responsable ante el sistema social al que pertenece.
Cómo estimularlo
- Mantener una vida familiar activa
- Apoyar los conceptos sobre si mismo.
- Permitir que sea un niño rebelde de una manera segura.
- Insistir en las reglas.
- Defender abiertamente los principios morales.
DESARROLLO HUMANO